lunes, 25 de julio de 2011

Un mensaje en favor… de la Escuela Pública.
 
Seamos de donde seamos, creemos que a los docentes nos tiene que unir una sola cosa: la Defensa de una Escuela Pública plural, inclusiva.
Tenemos la chance de decir lo que pensamos a quien la quiere privatizar,
destruir, cerrar. A a quien no dialoga, a quien agrede a las familias de nuestros alumnos, a quien encabeza la gestión más desatrosa de la historia porteña.
 
Tenemos una semana. Tenemos la posibilidad al acance de la mano. Y depende de nosotros.
 
Maestros del 13º
 
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No paramos de sorprendernos…
Durante el segundo semestre de 2010 más de 20 colegios de la Ciudad de Buenos Aires fueron tomados por los estudiantes secundarios en protesta por las malas condiciones edilicias en las que se encontraban estudiando.
Hoy, a casi 6 meses de la “resolución” del conflicto y a pocos días del comienzo del nuevo ciclo lectivo, siguen apareciendo vergonzosas desprolijidades en torno a este tema.
El gobierno de la ciudad no solo no construyó todas las escuelas que había prometido sino que destruye las que existen.
En el barrio de Parque Avellaneda, una escuela primaria ubicada en Lacarra al 1100 que solo había solicitado que se realicen algunos arreglos, se encuentra hoy convertida en una obra a medio terminar.
Pero no solo eso, sino que se le están haciendo reformas edilicias nunca solicitadas ni consultadas con los directivos de dicha institución.

Lo que termina por mostrar la inoperancia de la gestión macrista es que estas obras quitan lugar en las aulas y reducen los espacios verdes. Donde antes había césped ahora hay cemento y baldosas.

Pero nada es casual y sin segundas intenciones en las acciones del grupo amarillo ya que, según deslizaron los padres de la cooperadora, se comenta que “van a construir una playa de estacionamiento donde hoy hay espacio verde y para recreación”.

Padres y maestros de la Escuela 10, que está ubicada en el Parque Avellaneda y que solo necesitaba algunos arreglos por filtraciones, grietas y roturas, se sienten atropellados por la innecesaria (des-) construcción.

Desde el Ministerio de Educación indicaron que la escuela está dentro del plan de mantenimiento escolar y que las obras durarán 540 días; no impidiendo el desarrollo del ciclo lectivo venidero.

Lo cierto es que a la fecha, las aulas están vacías, los bancos apilados sin conocerse en qué condiciones y nadie puede garantizar la seguridad para que el próximo lunes los locos bajitos vuelvan a la escuela…

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